La ludopatía no es una enfermedad, sino un síndrome.

[manu1970]

La ludopatía suele llevar aparejada todo un cuadro clínico de síntomas psíquicos que tienen como principal protagonista la impaciencia, poca capacidad para soportar una situación límite, bajo nivel para controlar cualquier situación crítica y por tanto una gran facilidad para perder los nervios. Será una constante víctima de unos arrebatos que no podrá contener y de decisiones impulsivas, donde la razón quedará al margen.

No es una enfermedad, pues para que lo fuera debería ser motivada por una causa externa, como por ejemplo un accidente que le perturbara el comportamiento. Sin embargo no es así. La ludopatía se tiene, y no se adquiere. Se lleva implícita en lo genes, y para activarla sólo es necesario que el individuo entre en contacto con el juego. Así de simple.

En definitiva hablamos de una persona de psicología débil con poca capacidad para enfrentarse a la realidad de manera sosegada, dominando la situación. Muy al contrario el ludópata suele dejar que sea la situación la que le domine a él, y por eso es ludópata. Tiene una gran facilidad de enviciarse con cualquier droga, sea ésta física (una sustancia) o psicológica.

Y como su psicología es débil, es también impaciente. Lo quiere todo y lo quiere ya. No le hables de un proyecto de varios días o semanas porque no encaja en su mente, ya que es incapaz de esperar. Por eso le gusta el juego, porque es una fórmula perfecta para conseguir el éxito de manera fácil y rápida. Todo es cuestión de echar monedas o fichas, y se multiplicarán como los peces y los panes de Jesucristo. Eso es al menos lo que el cree, claro que cuando se enfrenta a la realidad se estrella con la evidencia. No obstante su respuesta a la pérdida será que "es el precio del aprendizaje". Siempre encontrará una excusa para seguir jugando: la próxima vez será distinto pues ya llevo la lección aprendida, piensa él.

Salvo que seas profesional no intentes hacerle ver que se mire ante el espejo de su locura, porque eso sería como pretender un ciego pueda ver aunque le pongas una lámpara de 1000 watios iluminando la habitación. El síndrome de la ludopatía no es muy distinta a otros como el síndrome de Down, en el sentido que se nace con él.

Pero entonces ¿La ludopatía tiene cura? La respuesta es no, ya que es una consecuencia directa de una forma de ser. Digamos que está integrada en su adn, y si le pones en a jugar ya no lo podrá dejar, igual que le será muy difícil cualquier otra droga que caiga en sus manos, sea tabaco, alcohol, cocaína, o cualquier otra, pues no será capaz de contenerse.

El tratamiento que precisa un ludópata, o mejor dicho, una persona con tendencia a la ludopatía, sería el mismo que el de un esquizofrénico, un psicópata o de todo aquel que padece un comportamiento perturbado. Debe apartarse del medio que propicia su adicción o si no caerá sin remedio.

La ludopatía no sólo afecta al juego de azar común, sino a otros ámbitos como La Bolsa o cualquier negocio al uso. El individuo que padece este síndrome jamás aceptará la derrota, y por eso cuando haya perdido hasta el último céntimo venderá hasta a su madre para conseguir más dinero con el que poder "recuperarse". Pero todo lo que invierta sólo servirá para una nueva bancarrota, pues su falta de capacidad para tener la situación bajo control le hará perder todo de nuevo. La impaciencia y su nerviosismo serán sus inevitables compañeros de viaje.

Y dicho todo esto, no le echemos la culpa al juego de que existan ludópatas, porque el ludópata lo es ya desde que nace, esto es, desde mucho antes de que haya entrado en contacto directo con el juego por primera vez. Y si mañana se prohibiese el juego, no os preocupéis que el ludópata caería en otro ámbito donde la apariencia indicase que se puede ganar dinero rápido y sin esfuerzo, pero que en realidad no sería más que una bonita pantalla de presentación con un fondo de ruina detrás.